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En una extensa entrevista con el programa radial «A Quien Corresponda», el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, expuso la complicada situación económica que atraviesa la provincia y cómo esta ha
afectado su capacidad de gestión. El mandatario señaló que la provincia
enfrenta «el peor momento de la historia de la democracia» con un 20%
menos de recursos en comparación con el año anterior y un 10% menos que durante
la pandemia, lo que ha significado «miles de millones de pesos» menos
para la administración provincial.
Frigerio destacó el impacto de esta crisis en diversos
sectores, como la educación, la obra pública y la cuestión social. Sobre el
conflicto docente, afirmó que la negociación es «muchísimo más
compleja» debido a la descentralización de la paritaria, que debe ser
validada en los 17 departamentos de la provincia. A pesar de las dificultades,
el gobernador expresó su deseo de resolver el conflicto, asegurando que están
dispuestos a destinar recursos adicionales para alcanzar un acuerdo.
El gobernador también se refirió a la situación de la obra
pública en la provincia, describiendo un «desmadre impresionante» con
obras paralizadas y una deuda de 30.000 millones de pesos. Frigerio enfatizó
que se está trabajando para reactivar las obras, aunque advirtió que no se
pueden hacer falsas promesas sobre infraestructuras que no podrán ser
financiadas.
En cuanto a la cuestión alimentaria, reconoció que «no
alcanza porque no hay plata», y subrayó la prioridad de su gobierno de
garantizar que nadie en la provincia se quede sin un plato de comida. Sin
embargo, advirtió que los recursos son insuficientes para cubrir todas las
necesidades.
Frigerio también abordó la problemática del narcotráfico,
destacando que nunca antes hubo tanto trabajo eficiente por parte de la policía
provincial en la lucha contra el narcomenudeo, aunque admitió que no es
suficiente debido a que se trata de un delito federal.
En relación a la reforma previsional, el gobernador reafirmó
su compromiso de salvar la Caja provincial de Jubilaciones y mantener el 82%
móvil, aunque reconoció que será necesario implementar reformas estructurales
que deben ser discutidas en la Legislatura.
Finalmente, Frigerio hizo un llamado a la humildad y
prudencia de la dirigencia política, criticando a aquellos que, tras haber
tenido responsabilidades de gobierno, ahora se presentan como expertos en
solucionar problemas que no abordaron durante sus gestiones. «La gente
exige de la dirigencia política mayor humildad, mayor prudencia, mayor sensatez
y sobre todo dejar hacer a los que ahora han elegido para cambiar una realidad
difícil que han generado, precisamente, esos dirigentes cuando han sido
funcionarios», concluyó.
Fuente: Análisis
Redacción de 7Paginas
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