La Fórmula 1 puso primera en el GP de Australia: con Colapinto en el paddock, Doohan provocó la primera bandera roja del año y Bearman hizo pedazos su Haas

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Con Franco Colapinto acodado en el paddock de Alpine a la espera de otra oportunidad como piloto titular, la Fórmula 1 arrancó este jueves a la noche la temporada 2025 con la Práctica 1 del Gran Premio de Australia, que se correrá este domingo a la madrugada en el moderno circuito de Albert Park, en Melbourne. Y hubo atractivos para todos los gustos con banderas rojas y sorpresas.

Ya sin el protagonismo estelar de Colapinto -ahora piloto de reserva de la escudería francesa-, y más allá del estreno oficial de Lewis Hamilton en Ferrari y del papel de los debutantes que llegaron para este 2025 a la Máxima, todas las miradas estuvieron puestas en lo que hicieron los compañeros del argentino: Pierre Gasly y Jack Doohan.

Y en esa pugna, el joven australiano -con apenas un GP sobre el lomo- llamó la atención por su condición de local, pero también por haber sido el responsable de la primera bandera roja de la temporada. ¿Qué le pasó? Se pasó de largo en una curva y, con la rueda trasera, levantó parte de la leca de protección que terminó sobre la pista. Hasta ese momento, Doohan había girado mucho más lento que el experimentado Gasly. Y era lógico. Se trata de un piloto muy experimentado -incluso ganó un GP- contra uno que estaba sumando su segunda experiencia en la Máxima.

BANDERA ROJA: pequeña salida de Doohan que ensució la pista en Australia. #AusGP | Toda la temporada de #F1 por #DisneyPlus Premium pic.twitter.com/DkO4gi6HJN
Sin embargo, sobre el final de la P1, Doohan terminó siendo más veloz que Gasly. El australiano finalizó 13° y le sacó 273 milésimas al galo que quedó con el 17° registro.
Ojo: Doohan no fue el único que la pasó mal en ese sector de la pista en el que tuvo el miniincidente. Es que vueltas más tarde, una vez que se reinició la P1, Oscar Piastri, el otro australiano, se fue sobre la leca con su McLaren y obligo a que las banderas amarillas asomaran.

Otro que tuvo un estreno accidentado fue Liam Lawson, que el año pasado corría en Racing Bulls y ahora fue promocionado a Red Bull. En uno de los primeros giros, el neozelandés estiró un frenaje y terminó dándole un beso a una pared con el flanco derecho de su auto. Zafó por milímetros de pegarse duro.
Mucho peor fue lo de Oliver Bearman, que destrozó su Haas luego de pegarse un brutal golpazo cuando faltaban 22 minutos para el final de la P1. Allí volvieron a aparecer las banderas rojas, pero con el agravante de que el auto quedó destrozado. No sufrió heridas el británico, pero el auto quedó muy dañado luego de que perdiera el control a la salida de las curvas 9 y 10. La trompa, el ala trasera y, tal vez, la suspensión y la caja les darán horas extra a los mecánicos de la escudería de bandera estadounidense.