Controversia y Tensiones en la Interna Peronista de Concordia: Un capítulo patético de chicanas y desconexión con la ciudadanía.
La interna peronista en Concordia se encuentra en suspenso, ya que el juez federal Leandro Ríos deberá decidir este viernes si autoriza la apertura de urnas cuyas actas fueron cuestionadas por la lista 44 encabezada por Armando Gay. Aunque el escrutinio definitivo ratificó la candidatura de Ángel Giano, quien ganó por una diferencia menor de votos que en el escrutinio provisorio, la lista 44 insiste en que la revisión de cuatro actas podría alterar el resultado a favor de Gay.
Mientras tanto, la ciudadanía de Concordia es testigo de un episodio político cargado de controversia y tensiones, que refleja la complejidad de la disputa interna peronista por la candidatura a la intendencia de la ciudad.
En medio de chicanas, operaciones de prensa y una aparente desconexión con los problemas que aquejan a la ciudadanía, se devela un escenario donde los intereses mezquinos y la angurria de poder parecen eclipsar las preocupaciones colectivas.
A horas de que se revele el escrutinio definitivo en la ciudad de Paraná, que arrojará luz definitiva sobre los resultados oficiales de la interna concordiense, las tensiones se intensifican: La lista 311, encabezada por el diputado Ángel Giano, se alza como la victoriosa con una exigua ventaja de 85 votos sobre la lista 44 “Armando Concordia”, liderada por el senador provincial Armando Gay. Sin embargo, la sombra de la duda se cierne sobre el proceso, ya que Gay, y “todo el aparato municipal” cuestionan los resultados y sostienen que poseen números que contradicen las actas oficiales de escrutinio.
Mientras los líderes políticos, funcionarios y ediles que integran listas se debaten en una batalla de cifras y argumentos, las redes sociales y grupos de WhatsApp también se convierten en un campo de confrontación. Chicanas y noticias falsas se propagan de tal modo y con tanto ingenio que si no fuera por una situación actual que es para el llanto tal vez serían motivo de risa. Pero todo este show absurdo y bizarro suena como un eco distante de los problemas cotidianos que preocupan a la ciudadanía (La economía en crisis y el avance de una ultraderecha ultra liberal que esta vez en serio amenaza con venir por todo), revelando un desconcierto que parece divorciarse de las urgencias de la vida real.
Esta mañana nomás, el Concejo Deliberante, que debería ser el epicentro de los debates y las decisiones locales, quedó inerte ante la falta de quórum. La mayoría de los concejales, de suculentas dietas, cuyos deberes deberían estar enfocados en atender las necesidades de la población, se ausentaron para dar el presente en el escrutinio final que se realiza en Paraná, vaya uno a saber con qué necesidad.
La población, mientras tanto, mira absorta este “panic show”, atrapada en los vaivenes de una economía en crisis, enfrentando una devaluación del peso y una inflación creciente.
En medio de la angustia e incertidumbre, no es mucho pedir que los representantes, al menos en una impostura de decoro, simulen poner el bienestar colectivo por encima de sus intereses particulares. Empatía, como se dice.
A pesar de la falta de críticas públicas por parte de los concejales presentes en el recinto, por lo bajo algunos se animaron a denunciar las ausencias como una muestra de mediocridad, señalando que luego, con razón, la comunidad les critica su dudoso compromiso en el servicio público. La mayoría de los concejales ausentes pertenecen a la lista 44 de Armando Gay, quien busca consolidar su posición como continuador de la gestión del actual intendente Enrique Cresto.
Diario Junio
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